En días pasados estaba haciendo mis compras habituales en un supermercado de cadena y pregunté a la persona encargada de registrar y al mismo tiempo de empacar -¿hay alguien que me pueda ayudar con mis paquetes?- y me respondió: "ya no tenemos personas que quieran venir a empacar, menos aún ayudar a cargar con los paquetes porque algunos clientes solo les ofrecen las monedas de la más baja denominación". Cuando hice el curso de Etiqueta y Protocolo, al respecto, nos enseñaron que a la persona que ayuda a llevar los paquetes a la salida de los supermercados se le da un mínimo de $2.000 pesos y ojalá más, pues en la mayoría de los casos no son empleados del lugar sino que simplemente se les permite empacar y quedarse con las propinas.
En los restaurantes, en caso de que el servicio no esté incluido en la cuenta, debe ser del 10 por ciento, y si el servicio fue muy bueno, del 15 o del 20 por ciento. Lo mismo se aplica a los hoteles, sitios de recreación y turismo. Las propinas recogidas y que son incluidas en la cuenta se reparten entre todos. Si hay una persona que se distinguió por su amabilidad, buena disposición y excelente servicio, se da un mínimo de $20.000 a esta persona en particular, pues en muchos casos estos empleados ganan el salario mínimo.
En los países europeos se costumbra del 10 al 15 por ciento. En toda Latinoamérica se hace los mismo, con excepción de México, donde el mínimo es el 15 por ciento. Los países asiáticos tienen sus diferencias. A las personas que se han encargado del viaje, como son los guías, conductores de bus y maleteros del hotel, suele entregarse el equivalente a dos dólares por cada día; la excepción es Japón, donde si se da propina la devuelven.
A los porteros y encargados de servicios generales de las casas en unidad, apartamentos u oficinas no se les da propina sino un buen regalo en Navidad; en algunas unidades o edificios es parte del reglamento, por decisión de la junta de propietarios, asignar una suma a cada uno, que entrega la administración.
Repito, no es obligatorio dar propina en Colombia. De todas maneras, en mi opinión personal, se trata de dejar una buena imagen en el recuerdo de quienes nos atienden y nos sirven con dedicación.
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